Una encuesta ha encontrado que los temores a la violencia electoral están generalizados. Muchos votantes de ambos lados del pasillo solo quieren que termine la campaña y las constantes disputas partidistas que se han infiltrado en todos los aspectos de la vida.
El Político
¿Cómo se volvió tan terrible la política? La ciencia dice que hay una razón: un “cóctel venenoso” de creencias llamado sectarismo político que convierte a los oponentes en enemigos mortales sin importar el problema.
Pero los candidatos presidenciales están luchando hasta el último minuto, y aún no se han devuelto millones de boletas por correo en estados clave.
El presidente Trump y el nominado demócrata Joe Biden desataron un frenesí de campañas de último minuto en Florida. Un estado que debe ganar para Trump, cuyos mítines repletos se han convertido en su propia responsabilidad política en medio de los crecientes casos de coronavirus.
Trump y Biden se dirigieron a Florida, en rápido crecimiento, donde sus eventos para votar mostraron enfoques muy contrastantes de la pandemia de COVID-19.
El enfoque en Florida se produce cuando las encuestas le dan a Biden una ligera ventaja en el estado, que tiene 29 votos electorales. La campaña de Trump necesita desesperadamente esos votos para tener ante sí un camino viable hacia la victoria.
Estados clave
En los últimos días, Trump ha aumentado la frecuencia de sus viajes, pero Biden continúa liderando en los principales estados en dísputa, a pesar de sus viajes limitados y las multitudes deliberadamente escasas.
Uno de esos estados, Pensilvania, es donde Trump ganó en 2016 en una derrota estrecha que ayudó a ponerlo en la Casa Blanca a pesar de perder el voto popular ante Hillary Clinton.
Muchos señalaron a los votantes “silenciosos” de Trump que asistieron. Esta vez, las encuestas muestran que Biden tiene una pequeña pero constante ventaja en Pensilvania, debido a su fuerte apoyo en las ciudades y los suburbios.
Pero en las áreas rurales, donde Trump tiende a dominar, también hay partidarios de Biden que prefieren mantener la calma. En Wisconsin, la hostilidad hacia Trump se está intensificando a medida que COVID-19 devasta pueblos pequeños.
Más sobre la elección
La Casa Blanca está rodeada de cercas por miedo a episodios de violencia, los comerciantes comienzan a cerrar los negocios, y un posible desconocimiento de los resultados empañan esta jornada, también azotada por el coronavirus y la polarización, el cielo anuncia tempestad, hasta un huracán ando por allí fuera de temporada.
Fuente: Univision
