El número de muertes por sobredosis superó las 8.400 en Europa, sobre todo vinculadas al consumo de opiáceos como la heroína, subrayó este martes la agencia europea sobre drogas, que apuntó a un resurgimiento de la cocaína en el continente.
Las drogas siguen siendo una amenaza constante (…) para nuestras sociedades" en Europa, donde "no sólo las muertes por sobredosis han aumentado de manera consistente" sino también su consumo, indicó en rueda de prensa el comisario europeo de Asuntos de Interior, Dimitris Avramopoulos.
El responsable europeo hizo estas declaraciones en Bruselas durante la presentación del informe de 2017 realizado por el Observatorio Europeo de las Drogas y Toxicomanías (OEDT), en base a los datos recabados en 2015 y 2016 en 30 países europeos (los 28 de la UE, Turquía y Noruega).
Según este informe, 8.441 personas fallecieron por sobredosis en 2015, un 6% más que el año anterior. Además, un 80% están vinculadas al consumo de heroína u otros derivados del opio, en un contexto de aumento de la pureza de la droga y de caída del precio.
Pese a este tercer aumento anual consecutivo, la tasa de mortalidad en Europa es mucho menor que en Estados Unidos, donde con mucha menos población, el saldo de muertos por sobredosis podría superar los 59.000 el año pasado, según datos preliminares recabados por el rotativo New York Times.
En Europa, tres de cada cuatro víctimas son hombres, explica el OEDT, que también apunta al impacto en los fallecimientos de las sustancias utilizadas en las terapias de desintoxicación, como la metadona, que en Dinamarca, Irlanda, Francia y Croacia supera por ejemplo a la heroína.
Esta agencia europea urge a reforzar las acciones para frenar las sobredosis, como la puesta en marcha de salas de consumo de drogas supervisado, operativas ya en siete países, así como una mayor distribución de la naxolona, una sustancia que permite detener las sobredosis por opiáceos.