Llegó la primavera a Europa, lo que indica que el uso de la calefacción termina, o por lo menos disminuye a niveles mínimos. Sin embargo, queda la pregunta de cómo será el próximo invierno y cómo se preparará el Viejo Continente sin el gas ruso.
El Político
La firma financiera alemana Berenberg, acaba con cualquier duda al afirmar que "hay gas suficiente: Europa debería estar a salvo el próximo invierno".
Por qué es importante
Los estrategas de Berenberg, que se apoyan en varias cuestiones para sostener tal afirmación. Primero, en los niveles actuales de reservas. Y es que Europa ha cerrado la temporada de invierno con los almacenes de gas al 56% de su capacidad, frente al 26% de hace un año.
Por tanto, dicen, aunque la pregunta es obvia, la respuesta también lo es. Muchos dudan si con el poco gas ruso se podrá reponer el almacenamiento durante el verano.
¿No corre Europa el riesgo de sufrir escasez el próximo invierno, sobre todo si el tiempo es menos benigno?, es la cuestión más repetida por los inversores.
Sin embargo, los analistas de la firma alemana son contundentes. "Aunque no podemos descartarlo, parece poco probable", comentan.
Sobre todo, insisten, porque "la situación de partida es diferente" precisamente porque la UE ha terminado esta temporada de calefacción "con un récord de almacenamiento de gas".
Conclusión
"La UE necesita ahora comprar mucho menos gas de lo habitual para prepararse para el próximo invierno", destacan al respecto los expertos de Berenberg, que además remarcan que Europa ha sabido sobrellevar la situación "sorprendentemente bien", y esperan que esto se repita en unos meses.
En segundo lugar, bajo su punto de vista "Europa puede respirar aliviada" porque el intento de Vladimir Putin de "chantajear" al Viejo Continente "ha fracasado".
Y aunque el gas "sigue siendo caro" y el contrato de futuros del TTF holandés, de referencia en Europa, a 12 meses vista ronda los 52 euros/MWh y está "muy por encima de su media de 2015-2020″ de 20 euros/MWh, lo cierto es que los futuros del gas "están ahora ligeramente por debajo del precio implícito que el consumidor medio paga actualmente por el gas", apuntan desde la firma alemana.