El Tribunal Militar de Asiut, en el sur de Egipto, condenó hoy en rebeldía a cadena perpetua a 148 supuestos islamistas por atacar y quemar el museo de la ciudad de Malaui, en el valle del Nilo, informó hoy la agencia oficial de noticias egipcia, MENA.
La agencia explicó que estos condenados asaltaron y quemaron el museo en agosto de 2013, en el marco de los disturbios que estallaron en varios puntos del país tras el desalojo de las acampadas de islamistas y seguidores del depuesto expresidente Mohamed Mursi, en la capital egipcia.
En el mismo caso, el tribunal sentenció a otros 42 detenidos a diez años de cárcel, dos a cinco años y un año para un adolescente, pero también puso en libertad a diez personas.
El 14 junio de 2015, la Fiscalía egipcia envió a la justicia militar a un total de 58 acusados, supuestos miembros de los Hermanos Musulmanes, por haber perpetrado atentados terroristas contra las instalaciones públicas y las fuerzas de seguridad del país.
El entonces fiscal general, Hisham Barakat (asesinado en junio del mismo año), ordenó el traslado a la Fiscalía de los acusados, 37 de los cuales estaban detenidos y el resto se encontraba en paradero desconocido.
La Fiscalía precisó que los acusados formaron un grupo terrorista en coordinación con líderes de los depuestos Hermanos Musulmanes con el fin de desestabilizar al Estado.
En octubre de 2014, el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, aprobó una ley en la cual los implicados en actos violentos contra instalaciones públicas consideradas "vitales" pueden ser juzgados en tribunales militares, algo muy criticado por las organizaciones de derechos humanos locales e internacionales.
Con información de EFE