El mandatario hondureño Juan Orlando Hernández ha afirmado sentir "gran tristeza" porque una corte de Nueva York sentenció culpable a su hermano ‘Tony’, pero se compromete a seguir colaborando con EEUU, mientras sus opositores aseguran que lidera un "narco-gobierno", reseñó Univisión.
El Político
Los reporteros David Adams y Jeff Ernst reseñan que muchos hondureños, enojados por la corrupción arraigada y la violencia desenfrenada del país, celebraron el viernes pasado el veredicto de culpabilidad emitido por un jurado de Nueva York contra Juan Antonio ‘Tony’ Hernández, el hermano del presidente Juan Orlando Hernández.
Sin embargo, no se conforman y quieren más, y es que aunque Hernández, de 41 años de edad, enfrenta posiblemente cadena perpetua, muchos hondureños exigen también la renuncia del mandatario.
El presidente Hernández, de 50 años de edad, estuvo muy involucrado en el caso y fue nombrado en los documentos judiciales como co-conspirador no acusado que presuntamente recibió dinero procedente del narcotráfico para financiar sus campañas electorales, detalla el portal.
Pero él negó rotundamente las acusaciones y no dio señales de querer renunciar antes de que acabe su actual segundo mandato en el año 2022.
El gobernante Partido Nacional controla el Congreso y, a pesar de algunos rumores de descontento en la policía y el ejército, parece no enfrentar una amenaza inmediata a su poder. Sin embargo, los líderes de la oposición están haciendo llamados a realizar grandes protestas callejeras y el presidente ha sufrido críticas mordaces por su turbio liderazgo moral en los medios locales y por parte de algunos en el sector privado.
"Todo depende de Estados Unidos, de las Fuerzas Armadas (hondureñas) y de la élite económica", expresó Carlos Hernández, director ejecutivo de la Asociación para una Sociedad Más Justa (ASJ), un influyente grupo de la sociedad civil en Honduras.
"Yo siento que tiene el apoyo de los dos primeros y la tercera siempre cuidará de sus propios intereses financieros y ha calculado que corren un mayor riesgo si lo expulsan", agregó.
David Adams y Jeff Ernst explican que si Hernández renunciara, el poder pasaría a tres "designados" vicepresidenciales, el presidente del congreso nacional o el presidente de la corte suprema, que son todos partidarios leales del presidente.
Es importante precisar que las Fuerzas Armadas de Honduras anunciaron la semana pasada que varios coroneles habían sido removidos de sus puestos sin explicación, un posible indicio de divisiones en sus filas sobre la legitimidad de Hernández.
Fuente: Univisión