La Comisión de Asuntos Constitucionales del Congreso de Argentina debatió el miércoles la expulsión del diputado Julio De Vido, un exministro de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner (2003-2015), implicado en múltiples denuncias sobre corrupción.
De Vido, exministro de planificación durante los 12 años de gobierno kirchnerista, fue procesado la semana pasada por presuntas irregularidades durante su gestión en la asignación de subsidios al gasoil para empresas de ómnibus urbanos y la próxima semana podría ser expulsado de su cargo actual como diputado.
La Comisión de Asuntos Constitucionales del Congreso quedó en cuarto intermedio y citó a De Vido para un descargo presencial sobre su posible expulsión por “inhabilidad moral”, el próximo martes.
De todos modos, la prensa local indica que el bloque oficialista de Cambiemos (partido del presidente Mauricio Macri) tendría un acuerdo con varias fuerzas de la oposición que también están enfrentadas al kirchnerismo y conseguirían los votos necesarios para expulsarlo en sesión.
Nunca he sido condenado por delito alguno, que ninguno de los temas que me imputan se relacionan con comportamientos funcionales propios del desempeño del cargo de ministro que ejercí”, detalló De Vido en una presentación por escrito ante la comisión parlamentaria.
Todo se desató luego de que el juez federal Claudio Bonadío procesara a De Vido y dispusiera un embargo en su contra por mil millones de pesos (58 millones de dólares).
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Bonadío, además, ordenó el lunes la detención de Víctor Manzanares, contador de la familia Kirchner, en el marco de otra causa que involucra a la exmandataria por asociación ilícita y lavado de activos.
El fiscal Carlos Stornelli pidió el desafuero y la detención de De Vido pero su pedido fue negado por el juez federal Luis Rodríguez, que dijo esperar resultados de nuevas medidas de prueba. AFP
